La selva es mujer

“La violación del cuerpo del bosque es lo mismo que la violación del cuerpo de las mujeres. Invadir, colonizar, vaciar, convertir en objetos o mercancías: esta es la lógica que ha llevado y sigue llevando al colapso de la vida en la Tierra.”

Eliane Brum

Nos encontramos en territorio desconocido. Nuestro hogar-planeta se calienta, desaparecen especies, eventos extremos empeoran y se vuelven más frecuentes, y cada vez hay un número mayor de refugiados y de muertes climáticas. La calidad de vida de las personas humanas y de la mayoría de las otras especies es cada vez peor, y, si no se hace nada, en pocas décadas o puede que, en pocos años, las nuevas generaciones vivirán en un ambiente hostil. Aquellos que alteran el paisaje de la Tierra tienen nombre y apellido, son, en su mayoría, blancos y hombres, están asociados a las grandes corporaciones transnacionales y a los gobiernos y parlamentos que les sirven con sus prácticas coloniales capitalistas. No pararán de consumir el planeta, ellos. Solo nosotros podemos pararlos. Y para ello, debemos destapar las centralidades del poder, transformarnos en otro tipo de humanos y crear unos modelos de sociedades muy deprisa, porque la corrosión de la Tierra se acelera cada vez más.

La escritora y periodista brasileña Eliane Brum, que vive en la Selva Amazónica, lleva años defendiendo que nuestra única posibilidad es recentralizar el mundo. La Amazonia y los otros enclaves de Naturaleza que aún mantienen la vida, como los océanos y el resto de biomas, son los legítimos centros de un mundo en mutación climática provocada por una minoría de humanos devoradores de mercaderías. El centro es allí donde está la vida —y no allí donde se encuentran los mercados.

Para comprender otras formas de ser y de estar en el hogar-planeta, Eliane invita a tres mujeres indígenas de la Amazonia, cuyos pueblos nunca se han separado de la Naturaleza. Al contrario, sus ancestros plantaron parte del mayor bosque tropical del planeta y viven en relación con todos los seres del bosque, visibles e invisibles. De distintos lugares de la selva, tienen en común su lucha por reexistir —resistir para existir— los ataques cada vez más intensos contra el cuerpo-Bosque —sus cuerpos: Patricia Gualinga, ecuatoriana, Ehuana Yaira Yanomami y Txai Suruí, brasileñas. También invita al brasileño Eduardo Neves, uno de los arqueólogos más importantes que se dedican a auscultar el pasado de la Amazonia, para una conversación sobre la recentralización de los valores a partir de la experiencia ancestral. Rescatando la memoria del bosque, la arqueología demuestra que otro mundo es posible —porque otros mundos han sido posibles y porque muchos otros aún resisten.

«La selva es mujer» es un ciclo comisariado por Eliane Brum en el marco de Resident CCCB, el programa de residencias internacionales del CCCB en colaboración con la UOC y con la financiación de la Fundació Privada MIR-PUIG.