Las representaciones artísticas de cada época documentan qué objetos de deseo se consideran apropiados, ilustrando así el gusto como un fenómeno histórico. Estas representaciones determinan qué desear y cómo, en mayor medida cuanto más diversas son las técnicas de reproductibilidad existentes en el momento de su creación. Mediante el análisis de algunas obras pictóricas, literarias y cinematográficas, este curso se propone examinar la construcción de la mirada que ha erigido a la mujer en privilegiado objeto del deseo, y qué servidumbres ha impuesto este proceso de «mitificación» tanto a hombres como a mujeres. A través de la Susana bíblica a la que tantos pintores retrataron—aunque ninguno como Artemisia Gentileschi, significativamente redescubierta en las últimas décadas—, la Carmen de Mérimée, la Albertine de Proust, la Conchita de Buñuel, la Madeleine de Hitchcock o la Lolita de Nabokov, trataremos de rastrear concepciones del deseo que no por naturalizadas resultan menos problemáticas.
28.09.2022
El deseo como impulso incontenible: «Susana y los viejos» de Gentileschi
«Susana y los viejos» es un tópico revisitado innumerables veces en la pintura europea. No obstante, pocos artistas invitan al espectador a preguntarse por ese motivo bíblico como Artemisia Gentileschi, pintora italiana del Barroco que elaboró de un modo singularísimo el tema. El análisis de su versión realizada en 1610 pone en evidencia el prejuicio del deseo como pulsión incontenible que abonaron las representaciones del motivo en la pintura.
05.10.2022
El deseo como tormento: Proust y los celos
Pocos escritores han diseccionado la vida sentimental con tanta minuciosidad como Marcel Proust, no sólo en su En busca del tiempo perdido, sino también en su obra temprana Los placeres y los días. La lectura atenta de La prisionera y del relato «El final de los celos» nos descubre el vínculo que une de forma inseparable la concepción del deseo amoroso como afán de posesión al infortunio.
19.10.2022
El deseo como fatalidad: de Carmen a Lolita, pasando por Madeleine y Conchita
En el marco de la concepción trágica del deseo que tan agudamente analizó Proust, en el siglo xix había emergido la figura mítica, tan deseable como aterradora, de la femme fatale. El análisis de personajes femeninos fatales y su paulatina problematización en la literatura y el cine—desde la Carmen de Mérimée o la Madeleine de Hitchcock hasta la Conchita de Buñuel o la Lolita de Nabokov—nos permitirá desentrañar el estereotipo de la femme fatale como síntoma elocuente de la misoginia en el último siglo.