Exposición
Canaletto: Una Venecia Imaginaria
La muestra contará con una selección de obras originales de este pintor que incluye "vistas", "caprichos" y grabados. Asimismo, se mostrarán obras de otros pintores coetáneos que reproducían vistas (Carlevarijs, Marieschi, Bernardo Canal..), entre los cuales destaca Bernardo Bellotto, "el otro Canaletto", que contribuyó decisivamente a fundar "la imagen de marca de Canaletto" en toda Europa, y que hasta hace muy poco no ha sido reconocido en toda su valía autónoma.
Canaletto no pintó Venecia, la inventó. Y quizá sea esta Venecia imaginaria la que cuajó en la emoción soñada de sus futuros visitantes. Porque las imágenes de Venecia que Canaletto creó muestran una ciudad estática, inmune a la decadencia o al deterioro. A menudo sublima la ciudad dilatándola en dimensiones fantásticas, aunque irreales, porque sus vistas van más allá del naturalismo y del virtuosismo de la reproducción de la realidad. A pesar de todo, hasta hace poco, Canaletto era considerado, de modo muy limitativo e históricamente falso, como "pintor-fotógrafo", reproductor mecánico de la realidad circundante. En realidad, sus vistas tienen un origen bastante más mental y bastante menos "fenoménico" de lo que habitualmente se afirma.Comisariado: Annalia Delneri, Dario Succi
En la primera parte se recogen 31 aguafuertes realizados por Canaletto entre 1740-1744, entre vedutas (vistas) y caprichos.
Canaletto, desmarcándose de sus predecesores, compagina una especie de summa en la que conviven y se mezclan, en ambos géneros (vedutas y caprichos), la vista topográfica, el capricho de las ruinas y el capricho paisajístico, con la intención de poner de manifiesto la complementariedad de esos géneros, desmintiendose, así, una contraposición proclamada por casi todos los estudiosos.
La parte central de la exposición está dedicada a las pinturas de Canaletto con una veintena de obras, la gran mayoría sobre tela y el resto sobre papel.
En este apartado se incluyen, también, obras de otros grandes paisajistas venecianos: Luca Carlevarijs, Bernardo Bellotto, Michele Marieschi, Francesco Guardi, Bernardo Canal, dando prioridad a aquellas telas que permiten una comparación directa con la Venecia del Maestro.
Finalmente, en la última sección, podremos ver cuarenta grabados, del Urbis Venetiarum Prospectus Celebriores, la exposición de aguafuertes con la que Antonio Visentini (1688-1782) tradujo las vistas "exactas" más significativas pintadas por Canaletto entre el final de los años veinte y el inicio de los años cuarenta.
La publicación del álbum tuvo una importancia fundamental tanto por la promoción internacional de Canaletto como por la novedad absoluta que representaba la compaginación de las imágenes, cuya secuencia marca un giro en el modo de ver la ciudad. La creación de un itinerario propuesto por esta secuencia de grabados, con el fondo de un paisaje que se convierte en el primer plano del siguiente, testimonia una actitud absolutamente inédita frente a la ciudad.
La antología Canaletto-Visentini no se contenta con catalogar las fachadas memorables, sino que penetra hasta la esencia del tejido urbano, cuya articulación son los edificios ilustres. La imagen de Venecia inventada por Canaletto y grabada por Visentini no es la ciudad real, y la función optimista de la vista cambia el significado: ya no festeja un pasado de superioridad immemorial, sino que anticipa un ambiente diferente para una sociedad tal vez regenerada, ciertamente más cívica.