Juego en línea divertido y al mismo tiempo perturbador, desarrollado con software libre, que parodia los rasgos insidiosamente invasivos del «software social». La ciudad «Elastic Versailles» se anima por la estrafalaria lógica combinatoria de una comunidad de 57 robots de inteligencia artificial que deducen datos de Facebook de los suscriptores del juego. La tripulación del robot Naked on Pluto, difícil de distinguir de los demás agentes en este entorno textual, está formada por guardianes disfuncionales. Los participantes del juego pueden romper los sistemas de control de acceso, pero los robots tienen una cierta flexibilidad para permanecer. Los jugadores pueden intentar anular las restricciones del juego y unirse para romper el sistema y escapar del mismo. Las actividades se describen en un blog y en Twitter, y los robots desbaratan la información del usuario y la de sus contactos mientras desarrollan un constante flujo de incitaciones a clicar, declarar, señalar y comprar, generando más o menos enlaces espurios a una velocidad vertiginosa. Rostros familiares desconcertantes y la información propia y de los perfiles asociados se mezclan indiscriminadamente en un paisaje hortera, casi como el del Versalles original, diseñado para desfiles promocionales de atributos personales e ideológicos inseparables. Ninguna información del jugador queda almacenada, ni se comparte ni se devuelve a Facebook en este ecosistema manejable en el que todo lo que cuenta son resplandores de una visibilidad fugaz.
Naked on Pluto caricaturiza la proliferación de agentes virtuales que recogen nuestros datos personales para reformular de modo insidioso nuestros entornos y perfiles virtuales, resaltando los contrastes ambivalentes de las redes sociales: los amigos como atractivos cuantificables y personas cuidadosamente a la moda que logran impartir un sentido de «intimidad», y publicaciones nada ingenuas de datos «privados» como si se tratara de autopublicidad. La emergencia de la inteligencia de este juego es, en última instancia, esperanzadoramente, la de los jugadores que intentan escaparse de ella.
